domingo, 8 de agosto de 2021

Reconstrucción

 











Cuando el dolor acabe, cuando ya nada de lo sucedido pueda afectarte, recuperate a ti mismo y amate. Amate mucho. Como nunca nadie lo hizo antes. Tal vez solo tus padres. Cuando hayas reconstruido la estructura que sujetaba tu cuerpo, tu alma, tu espíritu, tu dignidad, tu autoestima, tu autoconfianza, disfruta y atrévete. Pero sé tú quién ponga reglas a la vida. No dañar, no jugar, no más tiempo perdido. Cuando por fin hayas perdido y asumido las consecuencias, por fin habrás ganado.

Cuando no te duela, porque la vida hace daño, las relaciones hacen daño, los acontecimientos hacen daño. El fracaso duele, el triunfo duele, porque como puede suceder como todo lo que acontece, tiene un impacto en ti y en las personas que te rodean y puede por terminar alejándote de ellas.



No hay comentarios:

Publicar un comentario